Muy poquita cosa.

Esa soy yo. Mírame. Poquita cosa si no miras bien. De las que no destaca a primera vista, pero que acaba haciéndolo sin querer. Yo. Tan definida a veces y tan ausente otras. De las que pocas veces se les notas cuando tienen un mal día y de las que te lo contará ella si es el mejor de su vida. Unas veces tan arriba y otras abajo, pero siempre me levanto. Presumo de saber mentir, pero si me miras a los ojos, ellos te lo chivaran todo. Si no estoy bien, si estoy feliz, si te quiero, o si te odio... Pero tienes que atreverte a mirar en ellos. Soy independiente y muy cariñosa. Cuando el corazón me lo pide, sigo sus impulsos. Te salto encima, te abrazo fuerte o te como a besos. Soy una puta locura, amante de la improvisación, que ríe, salta, baila, que busca la novedad y la aventura en todo lo que hace. Que hasta a lo más absurdo y cotidiano le da un toque divertido. Analista de las sonrisas de quien se cruza por la calle, y enamorada de una sola. Escucho canciones tristes para no olvidar. De esas que mata por la gente que quiere. De las que se derrumbaría si no tuviera a sus amigos y de las que cada día echa de menos a esa persona que se fue. Un poquito orgullosa, cabezota y vengativa. Sacaré fuerzas de donde pueda y te contaré el lado bueno de las cosas. De esas que solo enseña lo mejor que tiene a quien se atreve a conocerlo. De las que si te regala un beso no tiene porque regalarte también el corazón. Gánatela y te la daré, eso y todo lo que me pidas. Esa soy yo.