La primera vez qe te pregunté si eras feliz, no titubeaste un segundo a la hora de dar tu respuesta.
No negaré qe tus palabras me sorprendieron, y me parecieron más fruto de la pasión romántica qe de la realidad. Después de todo la felicidad siempre me ha parecido algo tan efímero como relativo.
Volví a preguntártelo muchas veces más, muchísimas. Y tu respuesta ha sido siempre exactamente la misma, sin variarla una coma.
Y sigo mirándote a los ojos buscando la respuesta, mientras me sonríes teniendo la certeza de qe no importa qe lo comprenda o no, esa es tu realidad, y en ella mandas tú.
- ¿Eres feliz?
- Sólo si tú lo eres.
No hay comentarios:
Publicar un comentario